Verde de amor, verde de compasión que me hace respirar y me late el corazón. “¡Ay verde que te quiero verde!”, cantó el andaluz. Desfila hacia el laberinto un verde de caramelo; verde de quintaesencia, verde de ideología, verde de conciencia. Es mi amor a la naturaleza, es un no a la tecnología sin sentido. Es mi verde de independencia, ni bueno ni malo, ni frío como el azul, ni cálido como el rojo. El verde es mi temperatura agradable. Desfila tu neutralidad, verde querido. Eres mi tranquilidad. Ahí vas, tomas de la mano al azul y forman tolerancia. Verde de ciudad. Áreas verdes. Cosmética verde. Medicina verde. Van marchando los verdes en el laberinto de los colores. Verde menta, verde esmeralda, verde oscuro, verde arrugado. Es la vida en primavera y refresco para el alma. Madera verde, recién cortada. Verde de juventud de cerezas en flor. Verde de Venus, diosa del jardín y de la huerta. Tauro te acompaña por los trigales. Verde esperanza que germina muy adentro de mí. Verde de Maho...