Ir al contenido principal

Revisión


REVISIÓN

Me he despertado. Hoy cumplo años, ¿Otro año? ¿Otro día? Gracias Deseo de vivir por estar conmigo. Gracias Pasión por acompañarme. Y a ti Voluntad, que sería yo sin ti, gracias. Hola, Memoria, pensé que te habías marchado, pero no, gracias por seguir ahí. Y a ustedes dos, hermanas gemelas, centinelas de mi alma, Esperanza y Fe, gracias pero muchas gracias por sostenerme. Y a ti mi gran Amor, sin ti nada tendría sentido, ven acércate y llévame por la senda angosta a hacer todo el bien que pueda. Por lo demás, no me preocupa entender la Vida sino vivirla y darla. Si obtengo Paz, bien, estaré en mi Verdad. Y eso me basta.-Héctor Rivero

Comentarios

Entradas populares de este blog

Poema a una mujer hermosa

Hermosa  mujer, si aceptaras ser mi amor tendrías cada día mi mirada, mil y una caricias de noche y mi presencia sería tu almohada. Siempre estarán contigo mi tacto, mi alegría, mis abrazos, mis palabras, mis besos y mi sexo. Mi romance solo serías tú, y te haré sentir diosa,  llevarte a las estrellas; serías mujer, no un cuerpo; un corazón, un sentimiento; te admiraré todos los días y te conquistaría en cada momento hasta la profundo. Serías mi todo, mi mundo, no un mero rostro; mi misterio no resuelto, mi universo. Te llenaría de sonrisas el vientre y tendrías todo mi afecto, mi respeto, mi dulzura, y todo mi amor por siempre, con anverso y sin reverso… Mas si de tus labios solo fluye silencio y al mirarme en tus ojos no me hayo eso no importa, me iré contento pues  como quiera yo te amo...

CON MIS CINCO SENTIDOS Y MÁS

que delicia ver y verme en tus ojos y si me los arráncasen que hermoso escuchar la música de tu voz y si sordo me quedara que maravilla poder besar tus labios y si no pudiera  que sensacional poder tocar tu piel y si me lo prohíbieras que rico oler tu aroma y si de nada pudiera qué divino imaginarte y poderte amar mujer

Necesito una mujer

QUIERO una  mujer que me goce, necesito una mujer que me devore, que se coma mi corazón a pedacitos y luego los escupa lentamente entre las flores; como si fueran  semillitas de granada; que me trague la esencia y me lleve al éxtasis; y que  de mi haga lo que se le antoje cuando estemos en la cama; que me arañe la espalda y me muerda la boca… que con mi piel y mi sangre amase el pan de mi amor migaja  a migaja  y gota a gota... Solo  entonces podré al fin volar...