Máscara
Si apenas existimos y no vivimos lo que somos no nos queda más remedio que soñar, columpiarnos en la fantasía y preparar los ojos para el golpe de un nuevo día que siempre parece el mismo y eterno en un circulo sin fin. Y ponernos la máscara.
Para volver a comenzar atados a la esperanza, escondernos dentro de un vaso de vino, en un buen libro, en una nube al pasar o quien sabe en que…
Por eso no tengo listas de cosas que quiero hacer o tener antes de partir, ¿para qué?
Las tendré allá, de donde vine y volveré, sin máscara.
Si un día de vida tan solo me quedara, pues como siempre he vivido así lo viviré; pero me entregaría más desesperadamente al amor...
Soy como un poema de Neruda recitado por ti en una noche muy oscura…por favor no calles.
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